A partir del 1 de febrero de 2014 todas las transferencias (pagos puntuales, masivos, de nóminas y pensiones) y adeudos directos (domiciliaciones bancarias, ya sean pagos periódicos o puntuales) se realizarán obligatoriamente de acuerdo con las reglas de la Zona Única de Pagos en Euros (Single Euro Payments Area, SEPA).
Desde ese momento sólo podrán realizarse aquellas operaciones que respeten las características técnicas y de negocio de los instrumentos SEPA.
¿Cómo afecta SEPA a su negocio?
- Actividad comercial: requiere transformar o migrar los datos de las cuentas bancarias de clientes, proveedores del sistema al nuevo código IBAN y al nuevo código BIC o SWIFT.
- Actividad contable y financiera: deberán utilizar los nuevos ficheros de intercambio bancario a las nuevas normas estándares SEPA.
- Gestión de empleados y pagos de nóminas a través de transferencia: deben adecuarse a SEPA y actualizar las cuentas bancarias CCC al nuevo formato IBAN.